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Dos años después de la “ley del tabaco”

Dos años después de la “ley del tabaco”

Fecha de publicación: 11 de enero de 2013

Hace dos años que se aprobó la llamada ley de tabaco. Durante los meses previos y posteriores hubo un fuerte debate social en torno a los problemas y daños que iba a causar su aprobación.

Una vez más multinacionales de tabaco y sectores afines, liberaron a " Catastrof" ese monstruo apocalíptico portador de todos los males y desgracias que pueden asolar a un país. Se hablaba de cuantiosas pérdidas económicas y de una fuerte destrucción de empleo en el sector de la hostelería, amén de un aumento de la conflictividad social al tener que salir los fumadores a la calle para poder fumar.

¿Qué ha pasado y que nos dicen las estadísticas en estos dos años? A pesar de la crisis económica no se ha producido la destrucción de empleo que anunciaba las empresas hosteleras, además de ser el sector hostelero uno de los pocos en el que hubo un crecimiento aunque moderado en número de empleos.

Los distintas estudios y encuestas realizadas nos dicen que el grado de aceptación y cumplimiento de la Ley es muy alto, entre un 95 y un 99%, con algunas anécdotas puntuales que tuvieron muchísima resonancia mediática (asador de Marbella).Ha habido una disminución importante de las ventas del cigarrillos en torno al 16 %, y un trasvase de fumadores a consumos de tabaco de liar, puros, pipa.Ha habido un descenso del número de fumadores, según cálculos aproximados entre 800.000 y 1.200.000 ( entre un 2 - 4% menos). En el próximo mes de enero de 2013 se publicarán los datos oficiales de la Encuesta Nacional de Salud. Otro de los beneficios demostrados de la aprobación de la ley es que existe menos contaminación en locales de restauración y ocio (90%) y menos población expuesta al humo de tabaco y durante menos tiempo, lo que supone en términos estadísticos 1.000 fallecimientos menos al año.

Estudios recientes publicados en otros países avanzados que aprobaron este tipo de leyes con anterioridad han demostrado una disminución del 15% en las hospitalizaciones por infarto agudo de miocardio, una caída del 16% por las hospitalizaciones debidas a accidente cerebrovascular, y una disminución del 24% de las hospitalizaciones por enfermedades respiratorias (asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica).

Además de los costes sanitarios y sociales asociados al consumo de tabaco, existe una disminución de la productividad laboral y está demostrado que los fumadores pierden una media de 2 a 3 días de trabajo más que los no fumadores cada año. Además de mejorar la salud y prevenir enfermedades el no fumar parece que reduce el absentismo en el trabajo y reduce costes en los empleadores.

En nuestro país en un estudio aún pendiente de publicar del Instituto INCLIVA, ha puesto de manifiesto que las leyes antitabaco que entraron en vigor en 2006 y en 2011 han sido capaces de mejorar la salud de la población de la Comunidad Valenciana calculando que la tasa de ingresos hospitalarios por infarto agudo de miocardio se redujo después de la aprobación de estas leyes, evitando según sus cálculos 1.765 casos de infarto agudo de miocardio en el periodo de seis años, 1.286 casos en hombres y 476 en mujeres. El objetivo de un sistema sanitario es la de mejorar la salud de sus ciudadanos y aunque habrá que esperar más tiempo para que se puedan publicar nuevos estudios más concluyentes, está demostrado el impacto este tipo de leyes en la salud de la población general. 

Recientemente la Comisión Europea ha presentado su propuesta para reformar la Directiva sobre el Tabaco que incluye un nuevo grupo de normas que regula el uso del tabaco y dificulta más el acceso a estos productos y su venta con el objetivo principal de disminuir el número de adolescentes y población joven, ya que el 70% empieza a fumar antes de los 18 años y el 94% antes de los 25. Esta propuesta de la Comisión Europea ha advertido de que casi 700.000 personas mueren cada año en Europa por el consumo de tabaco y cerca de la mitad de los fumadores tiene una media de 14 años menos de vida.

Esta normativa ha provocado de nuevo la salida de "Catastrof" como no podía ser menos. Han rechazado este propuesta diversas organizaciones sociales como sindicatos, hosteleros, multinacionales y hasta el Parlamento de Navarra...

Solo recordar que desde hace más de 10 años, los gobiernos y organismos internacionales están introduciendo diversas alternativas para el reemplazo de los cultivos y productos del tabaco para hacer más tolerable socialmente su sustitución. La repercusión de la directiva se traducirá en una mejora del estado de salud de su población, deberíamos y tendríamos que educar y mejorar los conocimientos de la población general sobre los riesgos del consumo de tabaco.

Los gobiernos y las administraciones sanitarias tienen la obligación ética y moral de proteger a la población de las consecuencias que provoca el tabaco en la salud de sus ciudadanos, no anteponiendo los intereses económicos a los sanitarios.

 

Placido Gascó

Coordinador GAT semFYC